El "English National Ballet", anteriormente conocido como "London Festival Ballet", es la segunda compañía de danza clásica del Reino Unido y, desde el pasado mes de septiembre, tras la marcha de Wayne Eagling, cuenta con la española Tamara Rojo como nueva directora artística.
Rojo, bailarina en activo galardonada con un premio "Príncipe de Asturias a las Artes", accede al cargo en un momento delicado, ya que la compañía se encuentra inmersa en una profunda crisis de gestión directiva y económica; dándose la paradoja de que, a pesar de las extraordinarias críticas recibidas por sus producciones de las últimas temporadas, el fracaso en taquilla y sus consecuentes pérdidas económicas han resultado inevitables.
Con el firme propósito de reflotar la entidad y devolverle tanto su esplendor artístico como su salud contable, se presenta el nuevo plan estratégico para esta nueva etapa y, una de las principales acciones, obviamente, ha sido reformular la identidad.
La nueva imagen, creada por el estudio británico "The Beautiful Meme" (www.thebeautifulmeme.com), parte del enunciado "tenemos algo que decir" como concepto a partir del cual se desarrolla el imagotipo; compuesto, por un lado, por dos comillas, en referencia explícita a la acción comunicativa de la identidad que, en un segundo nivel de lectura, invocan a la postura de los pies "en pointe" -de puntillas-, una de las técnicas principales que se aprenden y adoptan al bailar danza clásica.
Tom Sharp, director creativo del estudio autor, justifica el proyecto y la elección de la fuente tipográfica: "…la visión de Tamara es conseguir que el ENB se erija como la compañía más creativa del Reino Unido… nos decantamos por la Aktiv Grotesk porque es una fuente seria y limpia que posee un grado de neutralidad idóneo que se complementa perfectamente con las fotografías, base importante de la nueva identidad y de la nueva estética con la que tratamos de dejar de lado la imagen clásica de las bailarinas con tutús para mostrar la intensidad y la creatividad…"
Como se desprende de las palabras de Tom, además de con la renovación del imagotipo, la identidad se construye con la intención del ENB de trabajar con diferentes creativos y casas de moda en cada temporada, y para esta primera ocasión han contado con los modelos de la diseñadora Vivienne Westwood y con el punto de vista del fotógrafo Guy Farrow.
En mi opinión, si bien es cierto que, debido a la importancia y al cuidado que se le quiere otorgar a la fotografía y al vestuario como representación del nuevo ciclo que se inicia, tiene sentido que el imagotipo mantenga -desde el punto de vista visual- un carácter discreto y moderado, creo que no se ha conseguido transitar la senda de lo sobrio sin traspasar el límite de lo directamente anodino.